VIRAL   

por Felipe Muñoz Tirado - 2022
Han pasado 2 años, 6 meses y 6 días desde el primer contagio de Covid-19 en Chile, a partir de ese primer contagio a la fecha han muerto cerca de 60mil personas en nuestro país y todos en el territorio conocemos a, al menos, un conocido que ha sufrido las consecuencias de este virus que nos mantuvo en encierro durante meses.

En este periodo de tiempo gobernado por lo incierto, la editorial “El Rayo Verde” en un ejercicio socio-político para enfrentar la incertidumbre, publicó durante el 2020 una serie de Boletines abordando diferentes historias de como se enfrentaba, en ese momento, la crisis que hasta el día de hoy repercute en nuestro cotidiano.

Estas historias narradas visualmente por una serie de fotógrafxs convocados por la editorial, están acompañadas por una serie de textos escritos por especialistas de diferentes áreas y disciplinas quienes fueron relatando las diferentes vivencias, perspectivas y maneras en las que enfrentó y experienció cada unx esta pandemia.

Cada una de estas pequeñas historias[1] vividas dentro de esta otra gran historia, nos acercan punzantemente a la crisis social que puso en tensión una serie de factores que venía arrastrando el país desde incluso de antes de la pandemia, con el estallido social.

El constante estado de alerta y miedo que se vivía en tensión, no hicieron más que extremar la crisis que albergaba el país, ejercicio panorámico de una realidad crítica que se arrastraba desde el 2019 y que ya había sido abordada por la misma editorial en otras publicaciones.

Es en este sentido, que leyendo globalmente la serie de boletines presentados en VIRAL podemos (re)accionar y relacionar las diferentes historias individuales presentadas por lxs fotográfxs e
investigadores para entender como esa serie de historias individuales se convierten en un reflejo de una historia colectiva mayor vivida en nuestro país.

La relevancia de la documentación presentada en VIRAL, pone en evidencia y permite constatar la crítica situación menor vivida dentro de este otro problema mayor. Una crisis para nada nueva, pero que se desborda tal como en su momento se desbordó la rabia meses antes de que comenzara la crisis mundial.

Es en VIRAL, donde la fotografía es articulada desde los discursos individuales de cada unx de lxs fotógrafxs, en relación a la experiencia vivida, convirtiéndose en una articulación estética de esta catástrofe global que vivimos como humanidad en una escala personal. Permitiendo con ello palpar el dolor y ponerle rostro, piel y sentimientos a la serie de números y estadísticas que circulaban día a día por lo medios hegemónicos de comunicación.

La función de los boletines publicados por la El Rayo Verde durante la pandemia, se podría entender entonces como un ejercicio contra la mecanización de la muerte, de ver una y otra vez cómo convertían a las personas fallecidas en números, deshumanizando la crisis y sus repercusiones.  Un acto contra-hegemónico necesario en contextos como el que vivimos hoy, donde es importante dejar de pensar en números y gráficos para dar paso a las personas y sus propias vivencias.

Deshumanizar la comunicación no es más que otro ejercicio para desarticular los afectos colectivos y consolidar el individualismo.


[1] En referencia a los conceptos de historia mayor y menor presentados en el texto “Tan lejos tan cerca, o la ubicuidad de los límites en tiempo de cuarentenas” de Nathalie Goffard publicado en VIRAL.