“La cámara es un
dispositivo a través del cual me resulta posible conectar con el dentro y fuera
de los estados del alma”
Isabel Tapia
Entrevista
por Daniela Mancilla - 2023
por Daniela Mancilla - 2023
"Observar"
proviene del latín observare y significa "mirar con
atención". El arte de la observación permite descubrir. Mientras más
observamos, más revelamos, más intuimos, más entendemos, más desciframos.
La artista medial chilena, Isabel Tapia Chaigneau, recoge este concepto como elemento de investigación a través del cual experimenta con diferentes soportes y dispositivos. Transita la performance, fotografía, instalación, video y el arte sonoro.
Su aproximación a la fotografía nació desde la curiosidad que tenía hacia las cámaras fotográficas y la posibilidad de capturar algo que levantara su interés. “Eso ocurrió en mi infancia con la point and shoot que tenía mi familia, solía sacarla a escondidas y tomar fotos en los viajes familiares, siempre me interesaron los detalles, lo pequeño y la naturaleza. Con el tiempo, de adolescente ahorré y adquirí mi primera cámara digital, y al egresar del colegio heredé la point and shoot familiar”, recuerda.
A través de los años, el rol de la fotografía en la vida de Isabel se transformó en una forma de estar y hacer mundo. Manifiesta que el acto fotográfico lo practica todos los días, junto a largas caminatas que son su compañía del día a día.
“La cámara es un dispositivo a través del cual me resulta posible conectar con el dentro y fuera de los estados del alma, un puente de conexión con el mundo sensible y espiritual que perfora límites, hace posible habitar diversos poros. Para mí el poro encarna la apertura de caminos alternativos, permite reinventar y re descubrir espacios vividos”, revela en Letargo.
Isabel Tapia posee un estilo fotográfico que permite reconstruir el mundo de otra manera. Rescata la importancia del territorio desde un punto de vista ecológico sagrado, entendiendo que toda vida habla a través de una pluralidad de manifestaciones subjetivas. Valora cada rincón de la tierra, entendiendo que deben ser apreciadas y preservadas.
La artista medial chilena, Isabel Tapia Chaigneau, recoge este concepto como elemento de investigación a través del cual experimenta con diferentes soportes y dispositivos. Transita la performance, fotografía, instalación, video y el arte sonoro.
Su aproximación a la fotografía nació desde la curiosidad que tenía hacia las cámaras fotográficas y la posibilidad de capturar algo que levantara su interés. “Eso ocurrió en mi infancia con la point and shoot que tenía mi familia, solía sacarla a escondidas y tomar fotos en los viajes familiares, siempre me interesaron los detalles, lo pequeño y la naturaleza. Con el tiempo, de adolescente ahorré y adquirí mi primera cámara digital, y al egresar del colegio heredé la point and shoot familiar”, recuerda.
A través de los años, el rol de la fotografía en la vida de Isabel se transformó en una forma de estar y hacer mundo. Manifiesta que el acto fotográfico lo practica todos los días, junto a largas caminatas que son su compañía del día a día.
“La cámara es un dispositivo a través del cual me resulta posible conectar con el dentro y fuera de los estados del alma, un puente de conexión con el mundo sensible y espiritual que perfora límites, hace posible habitar diversos poros. Para mí el poro encarna la apertura de caminos alternativos, permite reinventar y re descubrir espacios vividos”, revela en Letargo.
Isabel Tapia posee un estilo fotográfico que permite reconstruir el mundo de otra manera. Rescata la importancia del territorio desde un punto de vista ecológico sagrado, entendiendo que toda vida habla a través de una pluralidad de manifestaciones subjetivas. Valora cada rincón de la tierra, entendiendo que deben ser apreciadas y preservadas.
Habitar como pájaro
A través del ejercicio de la escritura constante, la fotografía en caminatas cotidianas, la investigación de referentes de diferentes áreas tanto filosóficas, como audiovisuales y sonoras, es que se nutre el proceso creativo de Isabel. Así, nació uno de los proyectos fotográficos que le han dado una directriz muy especial a su trabajo. Se trata de Plan de vuelo.
“Plan de vuelo es el primer ejercicio derivado del habitar como pájaro. Investigación que toma el estudio del movimiento de las alas del pájaro para elevar sus cuerpos. Tomé un esquema de vuelo que fue publicado por la Universidad de Cambridge el año 2013, en este se identifican cuatro movimientos que posibilitan el vuelo de las aves”, dice Isabel Tapia.
Este trabajo fue realizado durante la residencia de taller de editorial en el marco del Festival Internacional de Fotografía de Valdivia 2022, antesala que le dio el impulso a una investigación más profunda sobre el vuelo de los pájaros junto al director del Centro de Ornitología de Chile, Sergio Alvarado.
“Habitar como pájaro es un ejercicio de caminata y fotografía análoga de ciudad desde el silencio, desde un ritmo autodeterminante de descubrir lo menor y revelador, el fragmento o lo descartado en estado de gracia ante la mirada desterritorializada del concepto de lo público y lo privado, una mirada de pájaro”
A través del ejercicio de la escritura constante, la fotografía en caminatas cotidianas, la investigación de referentes de diferentes áreas tanto filosóficas, como audiovisuales y sonoras, es que se nutre el proceso creativo de Isabel. Así, nació uno de los proyectos fotográficos que le han dado una directriz muy especial a su trabajo. Se trata de Plan de vuelo.
“Plan de vuelo es el primer ejercicio derivado del habitar como pájaro. Investigación que toma el estudio del movimiento de las alas del pájaro para elevar sus cuerpos. Tomé un esquema de vuelo que fue publicado por la Universidad de Cambridge el año 2013, en este se identifican cuatro movimientos que posibilitan el vuelo de las aves”, dice Isabel Tapia.
Este trabajo fue realizado durante la residencia de taller de editorial en el marco del Festival Internacional de Fotografía de Valdivia 2022, antesala que le dio el impulso a una investigación más profunda sobre el vuelo de los pájaros junto al director del Centro de Ornitología de Chile, Sergio Alvarado.
“Habitar como pájaro es un ejercicio de caminata y fotografía análoga de ciudad desde el silencio, desde un ritmo autodeterminante de descubrir lo menor y revelador, el fragmento o lo descartado en estado de gracia ante la mirada desterritorializada del concepto de lo público y lo privado, una mirada de pájaro”
El
vuelo de un pájaro articula un baile que cuenta su historia y no está
relacionado a un territorio. Isabel concluye citando lo que decía el poeta Sufi
Hafez: “Contemplar el vuelo de un pájaro es convertirse en pájaro”,
haciendo de este modo posible vivenciar el mundo desde otra mirada no
antropocéntrica.
-
a. A través de su canto los pájaros
comunican una comunicación
en la que dicen que no dicen nada.
b. El lenguaje de los pájaros
es un lenguaje de signos transparentes
en busca de la transparencia dispersa de algún significado.
c. Los pájaros encierran el significado de su propio canto
en la malla de un lenguaje vacío;
malla que es a un tiempo transparente e irrompible.
d. Incluso el silencio que se produce entre cada canto
es también un eslabón de esa malla, un signo, un momento
del mensaje que la naturaleza se dice a sí misma.
e. Para la naturaleza no es el canto de los pájaros
ni su equivalente, la palabra humana, sino el silencio,
el que convertido en mensaje tiene por objeto
establecer, prolongar o interrumpir la comunicación
para verificar si el circuito funciona
y si realmente los pájaros se comunican entre ellos
a través de los oídos de los hombres
y sin que estos se den cuenta.
-
a. A través de su canto los pájaros
comunican una comunicación
en la que dicen que no dicen nada.
b. El lenguaje de los pájaros
es un lenguaje de signos transparentes
en busca de la transparencia dispersa de algún significado.
c. Los pájaros encierran el significado de su propio canto
en la malla de un lenguaje vacío;
malla que es a un tiempo transparente e irrompible.
d. Incluso el silencio que se produce entre cada canto
es también un eslabón de esa malla, un signo, un momento
del mensaje que la naturaleza se dice a sí misma.
e. Para la naturaleza no es el canto de los pájaros
ni su equivalente, la palabra humana, sino el silencio,
el que convertido en mensaje tiene por objeto
establecer, prolongar o interrumpir la comunicación
para verificar si el circuito funciona
y si realmente los pájaros se comunican entre ellos
a través de los oídos de los hombres
y sin que estos se den cuenta.