IMA

por Katalina Cortes Olguin - 2023
“A lo lejos el atardecer, le corta la lengua el sol.
Bajo el agua las ciudades del cielo dejan de reír.
Las sombras caen de los árboles para aliarse conmigo”

Chika Sagawa
“Termina la separación entre el cuerpo y la mente”, con esta cita a Sergio Larraín es la manera en la que abre IMA, fotolibro de Teresa Arredondo. Existen varias particularidades en el formato de este objeto que nos permite dialogar de una forma no-occidentalizada y ayuda tener diferentes perspectivas en la lectura fotográfica como su propio lenguaje.

Primeramente, IMA se lee de derecha a izquierda, es decir, “se comienza por el final”. Pero más allá de lo puramente estético o de diseño, esta creación denota un relato autobiográfico mediante polaroids que exponen dolores en un viaje por Asia.

La parte inicial de esta publicación nos demuestra un conjunto de imágenes no-claras, borrosas y etéreas que nos denotan el eco que generan las heridas y las batallas internas que eso genera.
De esta forma nos muestra paisajes a través de ventanas o diferentes situaciones que nos hacen sentir que podemos estar con ella en ese mismo momento en el que tomó la instantánea. No obstante, estos paisajes llenos de luces de ocaso, tiene silencios oscuros entre medio, que permiten pausas para sentir.

Poco a poco el libro va dejando los paisajes borrosos y menos luminosos, para ir registrando el día a día de la ciudad habitada, hasta llegar a la culmine de la intimidad, de lo interno, llegando al espíritu que anima a seguir viviendo.

El eco amargo de la música / recuerdos que se humedecen / memoria / que se reseca. Leer IMA de Teresa Arredondo se siente como leer “Aire Oscuro” de Chika Sagawa, un viaje por las oscuridades del ser, que de alguna u otra manera, logran convertirse a claroscuros y “logran quitarse el dolor” en los matíces de la reflexión interna.